Ante un Cadáver, Manuel Acuña

¡Y bien! Aquí estás ya..., sobre la plancha1
donde el gran horizonte de la ciencia2
la extensión de sus límites ensancha.3

Aquí, donde la rígida experiencia4
viene a dictar las leyes superiores5
a que está sometida la existencia.6

Aquí, donde derrama sus fulgores7
ese astro a cuya luz desaparece8
la distinción de esclavos y señores.9

Aquí, donde la fábula enmudece10
y la voz de los hechos se levanta11
y la superstición se desvanece.12

Aquí, donde la ciencia se adelanta13
a leer la solución de ese problema14
que solo al anunciarse nos espanta.15

Ella, que tiene la razón por lema,16
y que en tus labios escuchar ansía17
la augusta voz de la verdad suprema.18

Aquí está ya... tras de la lucha impía19
en que romper al cabo conseguiste20
la cárcel que al dolor te retenía.21

La luz de tus pupilas ya no existe,22
tu máquina vital descansa inerte23
y a cumplir con su objeto se resiste.24

¡Miseria y nada más!, dirán al verte25
los que creen que el imperio de la vida26
acaba donde empieza el de la muerte.27

Y suponiendo tu misión cumplida28
se acercarán a ti, y en su mirada29
te mandarán la eterna despedida.30

¡Pero no!..., tu misión no está acabada,31
que ni es la nada el punto en que nacemos,32
ni el punto en que morimos es la nada.33

Círculo es la existencia, y mal hacemos34
cuando al querer medirla le asignamos35
la cuna y el sepulcro por extremos.36

La madre es solo el molde en que tomamos37
nuestra forma, la forma pasajera38
con que la ingrata vida atravesamos.39

Pero ni es esa forma la primera40
que nuestro ser reviste, ni tampoco41
será su última forma cuando muera.42

Tú sin aliento ya, dentro de poco43
volverás a la tierra y a su seno44
que es de la vida universal el foco.45

Y allí, a la vida, en apariencia ajeno,46
el poder de la lluvia y del verano47
fecundará de gérmenes tu cieno.48

Y al ascender de la raíz al grano,49
irás del vergel a ser testigo50
en el laboratorio soberano.51

Tal vez para volver cambiado en trigo52
al triste hogar, donde la triste esposa,53
sin encontrar un pan sueña contigo.54

En tanto que las grietas de tu fosa55
verán alzarse de su fondo abierto56
la larva convertida en mariposa,57

que en los ensayos de su vuelo incierto58
irá al lecho infeliz de tus amores59
a llevarle tus ósculos de muerto.60

Y en medio de esos cambios interiores61
tu cráneo, lleno de una nueva vida,62
en vez de pensamientos dará flores,63

en cuyo cáliz brillará escondida64
la lágrima tal vez con que tu amada65
acompañó el adiós de tu partida.66

La tumba es el final de la jornada,67
porque en la tumba es donde queda muerta68
la llama en nuestro espíritu encerrada.69

Pero en esa mansión a cuya puerta70
se extingue nuestro aliento, hay otro aliento71
que de nuevo a la vida nos despierta.72

Allí acaban la fuerza y el talento,73
allí acaban los goces y los males74
allí acaban la fe y el sentimiento.75

Allí acaban los lazos terrenales,76
y mezclados el sabio y el idiota77
se hunden en la región de los iguales.78

Pero allí donde el ánimo se agota79
y perece la máquina, allí mismo80
el ser que muere es otro ser que brota.81

El poderoso y fecundante abismo82
del antiguo organismo se apodera83
y forma y hace de él otro organismo.84

Abandona a la historia justiciera85
un nombre sin cuidarse, indiferente,86
de que ese nombre se eternice o muera.87

Él recoge la masa únicamente,88
y cambiando las formas y el objeto89
se encarga de que viva eternamente.90

La tumba sólo guarda un esqueleto91
mas la vida en su bóveda mortuoria92
prosigue alimentándose en secreto.93

Que al fin de esta existencia transitoria94
a la que tanto nuestro afán se adhiere,95
la materia, inmortal como la gloria,96
cambia de formas; pero nunca muere.97

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  • Esogh Nov., 2023

    Excelente poema, primera vez que lo leo. No cabe duda arte y pensamiento uno mismo.

  • Blanca Luz Martínez Reyes Abr., 2023

    Para un espectáculo investigue sobre Rosario de la Peña, juzque igual que hicieron con esta maravillosa mujer, Musa viviente de la que se enamoraban todos los hombres de letras, gran injusticia la mía, gracias a su información he podido concluir que ambos jóvenes simplemente fueron víctimas de su tiempo, de la sociedad, del amor romántico y sus fatales consecuencias.

  • Miguel Ángel Rodríguez López Feb., 2023

    Siempre me atrajo el hermoso poema de Nocturno a Rosario, del gran Manuel Acuña.
    Hoy al leer sobre su vida y obra, cuento admiro a este insigne personaje que sin duda alguna marcó en muchos de los románticos lectores el vehemente deseo de amar la vida muriendo en ella.

  • Saul Muñoz Lopez Sep., 2022

    La mentalidad del pobre.
    Hullen, y hulen la montaña de el solo, compañía tiene, el Sol. O la cuspida muerte de la vuelta a casa, montado, en bici. Por los caminos, de los atardeceres, y los dos fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. Alli, fuimos, entre sol, y espada. Si, solos… fuimos. Y, el mundo, puede temer el nombre, de Dios, el Dios, de los Cristianos. Sin, sin nombrado, puede, caer. Desde el cielo. Hacia, la tierra… pensaba, las cuerdas de el cielo, y el recorrido de el Sol. Tomandolo, por el propio servicio, al el mar, de ellos. Los amantes.

  • Saul Muñoz Lopez Ago., 2022

    Como la luna. Los paseores son como mi espacio personal de mi niñez, y las estrellas cuando hay luna se crean con la perfecccion aura, de el infinito, especialmente, claro, como en la tierra, la playa y el mar, de aguas tranquilas y, transparentes… como la tierra y el agua, y el mar. Se crean, con la perfeccion astral, de las estrellas y sus apariciones en la oscura noche…
    la laguna estigia, es la fuente, de el olvido.

  • Alfredo Neme David Jun., 2022

    Sabiduría profunda, experesada con poesia vehemente, donde el hombre extiende el horizonte de su sabiduría, para conocer la vida, donde expresa la naturaleza de la muerte, con como un bien o un mal, que tantas disertaciones filosóficas ha generado, sino como la ley superior a que está sometida la existencia, y entiende y sustenta las ideas religiosas de la eternidad y reencarnación, con una racionalidad incuestionable, y nos lleva de la tumba a la vida eterna y al infinito:
    ¡GRANDIOSO FILÓSOFO, CON POESIA EXPRESIVA Y LUMINOSA!
    Poca justicia se le ha hecho:

  • Gabby Jun., 2022

    Que puedo yo decir , que no se haya dicho antes …….venimos a este mundo
    con una encomienda , escrita en nuestra alma …y quien es el autor de lo que está escrito en ella……?
    Nada más y nada más que el creador de todo lo creado……el es el autor de mi existencia como también el que me dio vida también me dio el soplo de la vida eterna. Para darle gloria
    al que me dio vida ….su nombre eterno es Cristo , salvador , Jesús ,
    redentor, Dios , Dios eterno …ese es su nombre que vivirá por siempre
    en las profundidades de mi espíritu…
    donde nada se marchita y siempre vive
    como flor de un nuevo día ….


Análisis

En este poema, el poeta nos ofrece la visión de un cadáver desde dos puntos de vista, como base del conocimiento para curar al ser humano y aprender de todo lo que nos puede mostrar desde el punto de vista físico y, por otro lado, el de un organismo vivo que da vida, que antes de morir ha dejado su simiente para que una nueva persona realice un camino único, propio y extraordinario.

Nos ofrece la visión de un cadáver ante una autopsia, pero también el espacio en el que se ha de diseccionar para su estudio. Se dirige a él como si estuviera vivo. Un cadáver es una oportunidad de saber más sobre el ser humano. Aumentar el conocimiento es saber más sobre nuestro origen.

Es en la muerte, cuando somos un cadáver, cuando nos damos cuenta de que en ese momento no existen las escalas sociales. Ante él y su estudio, la conciencia, la verdad, lo real apartará supercherías, a los mitos y las creencias. Un cadáver da respuesta a las enfermedades y ayuda a sanar. La muerte nos habla y enseña la verdad de lo que somos.

Nuestro cuerpo, la carne, es algo que nos retiene, una cárcel en vida que se va consumiendo poco a poco. La presencia del cuerpo, aunque sin vida, nos impone a la hora de diseccionarlo. Para el poeta muchos creen que la muerte es el final y que tras el entierro y el velatorio no existe nada más.

Para él, la muerte es un nuevo comienzo. No se puede tomar como medidas vitales del ser humano el nacimiento y la muerte. La madre es el origen de nuestra vida, la que nos crea, pero nuestro cuerpo está constantemente transformándose y por eso la muerte no es el final de la evolución.

Nuestro cuerpo se convierte en polvo, polvo del que nacimos. Seremos, como polvo, base de una nueva vida, seremos abono de un nuevo alimento, de un nuevo maná. Nos transformaremos en pan. Gracias a la muerte de nuestro cuerpo daremos de comer a otros seres al pudrirnos, como por ejemplo el de una mariposa, que llena de belleza todo. Seremos abono de la belleza de una flor.

La tumba tampoco es el final porque damos vida gracias a que nuestros días han terminado. Con la muerte, el recuerdo de nosotros no desaparece. Al ser parte de la naturaleza, nunca desaparecemos. La tumba sólo un espacio del que nace la nueva vida. Es por ello que el poeta nos invita a vivir, pero no a aferrarnos demasiado a la vida, porque en realidad, nunca moriremos, sólo nos transformaremos.

Nota de Susana Marín.

Marín, Susana. Dic., 2014. Ante un Cadáver, de Manuel Acuña. Poemario. Acceso en https://poemario.com/ante-cadaver/

Ejemplos de figuras literarias en Ante un Cadáver

Figuras literarias Ejemplos Descripción
Metáfora "donde el gran horizonte de la ciencia la extensión de sus límites ensancha" Comparación implícita de la ciencia con un horizonte que se expande, mostrando el progreso y crecimiento del conocimiento.
Metáfora "ese astro a cuya luz desaparece la distinción de esclavos y señores" Comparación implícita de la ciencia con un astro que ilumina y elimina las diferencias sociales.
Simil "Círculo es la existencia" Comparación explícita de la existencia con un círculo, sugiriendo un ciclo continuo de vida y muerte.
Anáfora "allí acaban" Repetición de la frase "allí acaban" al comienzo de varios versos para destacar la finalización de diferentes aspectos de la vida en la tumba.
Elipsis "La tumba es el final de la jornada, porque en la tumba es donde queda muerta la llama en nuestro espíritu encerrada." Efecto de misterio y ambigüedad.
Hiperbatón "La tumba sólo guarda un esqueleto" Inversión del orden gramatical natural para enfatizar que la tumba solo contiene los restos físicos y no el espíritu o la esencia de la persona.
Metonimia "Abandona a la historia justiciera un nombre" Uso del "nombre" para representar la identidad y legado de una persona, destacando que la historia recuerda a los individuos por sus acciones y logros.